martes, 3 de marzo de 2009

CURSO

Curso CICOP ARG
Patrimonio y desarrollo sustentable. Herramientas y recursos
Arq. Guillermo Rubén García

Días: jueves 12, 19 y 26 de marzo de 2009

Horario 19hs. – 3 clases -

Diseño de instrumentos que permitan operaciones urbanas en el marco del “equilibrio adecuado y equitativo entre conservación, sustentabilidad y desarrollo”
Declaración de Budapest sobre patrimonio mundial
Reflexionar sobre técnicas que permiten optimizar la gestión estratégica de los proyectos de intervención en contextos patrimoniales, incorporando nuevas herramientas de valor que permitan su efectiva materialización.
Es factible generar desarrollo sostenible desde una perspectiva integral de la conservación que abarque al mismo tiempo el campo ambiental, el productivo y la recuperación del patrimonio cultural.
El curso consiste en la presentación de pautas para transformar conceptos abstractos en plataformas culturales y económicas para el desarrollo sustentable que en el marco de un plan de desarrollo estratégico contribuyan a la recuperación de aquellos valores que hacen al sitio único e irrepetible y garantizar el uso de las actuales generaciones de pobladores en primera instancia y que estos valores se conserven con un alto grado de autenticidad para las generaciones futuras.

Contenidos
Pautas para desarrollar en sitios de valor patrimonial proyectos vinculado a su historia e identidad, potenciando el conjunto de bienes culturales y naturales convirtiéndolos en un polo generador de servicios que genere flujos económicos hacia un desarrollo sustentable.
Como intervenir el recurso patrimonial para transformarlo en “brazo de palanca” que potencia las intervenciones en el entorno de sitios con valor.
Como instalar el “nombre” en la comunidad generando un clima propicio para que las fuerzas socio-económicas permitan dotar al emprendimiento de los fondos necesarios para su propio desarrollo.
Presentación de modelos de desarrollo y estrategias adecuadas para operar con el universo del patrimonio en forma de sistema.
Presentación de instrumentos que propician acciones para la transformación de un sistema o red local (que incluye al ámbito físico) en soporte de servicios que generen flujos económicos. Fuentes de financiamiento.
Propuesta metodológica basada en la articulación de buenas prácticas concatenadas entre sí a través de un plan que permita la evaluación constante de resultados en base a indicadores que acrediten los resultados desde la multidisciplina.
Informes e inscripción
Perú 272. Manzana de las Luces. Buenos Aires. Argentina
Atención: de 14 a 19 horas
Teléfono: (011) 4343-2281
E-mail: cicop@sinectis.com.ar / cicopar@yahoo.com.ar

CABALLITO

Proto Comuna Caballito
Hechos. No palabras.
Estimad@s amig@s:Nuestra situacion se acerca a la desesperacion. Reclamos, pedidos, marchas. Realmente de poco nos han servido. En el 2002 Caballito era el segundo barrio mas densamente poblado de la Ciudad, detrás de Recoleta, con 24.000 habitantes por km2. Desde ese momento se permisaron en nuestro barrio 1.400.000 m2 , en su mayoria ya construidos o en construccion. Segun nuestros calculos la poblacion de Caballito ya supera hoy los 30.000 habitantes por km2. La mayor de toda Argentina (que tiene un promedio de 11 Hxk2).Y una muy importante cantidad de obras terminaran a fines de este año y durante el 2010. Todos conocemos los problemas que estamos teniendo: Falta de espacios verdes, polucion de aire y ruido. Problemas de transito y transporte, falta de vacantes en colegios y jardines maternales. destruccion de arbolado, impermeabilización de las tierras. Por solo citar las mas evidentes. Infraestructuras colapsadas. En febrero del año 2007 se firmo el decreto 220/07 (despues de y gracias a los reclamos de los vecinos) que constata la emergencia en la provision de agua y sistema cloacal de Palermo, Villa Pueyrredon, Urquiza y Caballito.
Se prometieron obras, que debia realizar AYSA, que debian empezar en abril del 2007 por 300 millones de pesos. y no paso nada. Mas alla de la entrega de permisos de obra nueva por casi 500.000 m2 en Caballito, desde esta penosa contatacion. En resumen estamos perdiendo calidad de vida e hipotecando el futuro de nuestros hijosAhora a la falta de control y amiguismo de la administracion macrista para con los constructores se suma una propuesta del Gobierno Nacional para construir torres en los terrenos de la ex Playa de Cargas y Maniobras Caballito del FFCC Sarmiento. En los mismos terrenos, donde, hace ya 4 años, presentamos una Iniciativa Popular con la firma de 12.000 vecinos de Caballito pidiendo se realizara un parque publico. Firmas que entregamos el año pasado a la Legislatura de la Ciudad para acompañar un proyecto afin presentado por la diputada de Anchorena y el diputado Olivera.
Nuevamente expresamos publicamente; Estamos en total acuerdo con el soterramiento. Pero nos oponemos firmemente a los negociados con tierras publicas. Y exigimos la concrecion del Parque lineal Corredor Verde del Oeste, desde la estacion Once hasta Liniers. Basta de especulacion inmobiliaria, Defendamos nuestros derechos. El macrismo, ya abiertamente una fraccion del PJ, acuerda con el gobierno nacional en detrimento de la calidad de vida de los porteños. ¿Los vamos a dejar?

Lic. Gustavo Desplats
Proto Comuna Caballito
Informes: 4903-7444 15-4163-5901
Envio de correo SOLO a protocomunacaballito@yahoo.com
Blogs www.protocomunacaballito.blogspot.com
www.caballitocolapsa.blogspot.com
VIDEOS http://www.youtube.com/prensacaballito

NO DAN PIE CON BOLA

Depresión en San Telmo
Nada detiene los errores del gobierno porteño en nuestro barrio histórico: un decreto que nadie encuentra, obras que son zanjones, lámparas aberrantes y una confusión de libro con Palermo Viejo.

Por Sergio Kiernan

El fuerte calor de este verano no parece capaz de moderar el entusiasmo del gobierno porteño por estropear San Telmo. El peregrino proyecto de peatonalizar la calle Defensa ya empezó, con detalles de comedia negra, en la cuadra que va de Independencia a Chile. También se retomó la corrección de la cuadra de Estados Unidos entre Perú y Chacabuco, que desde que el mundo es mundo tenía la calle más ancha que en el resto. En la misma Estados Unidos, Espacio Público insiste en cambiar las luces y se está comprando una batalla enconada con los vecinos. Y se supo que Mauricio Macri ya firmó un decreto, el 1508, para restaurar fachadas de Defensa. Esta aparente buena idea se complica por la total opacidad del proceso: resulta que ya llamaron a licitación entre “diez empresas convocadas” pero nadie difundió la lista de edificios a restaurar, ni el pliego, ni el presupuesto. De hecho, ni siquiera publicaron el decreto en el Boletín Oficial, con lo que todo lo que hicieron es tan palmariamente ilegal que da risa. ¿No tienen un abogado en la Ciudad?

El pozo de Defensa
La cuadra de la vieja calle de la Defensa que va de Independencia a Chile parecía en este comienzo de año un canal holandés. Para estrenar el muy resistido proyecto Prioridad Peatón, las tropas del Ministerio de Desarrollo Urbano se pusieron a cavar y llegaron al metro veinte de profundidad. Como es el estilo del ministerio, que es en realidad un Comité Para que Odien a Macri, nadie le avisó nada a nadie. Por ejemplo, los comerciantes de la cuadra llegaron una bella mañana y se encontraron con la calle cortada. Se están perdiendo la temporada de verano, con lo que se suman a la legión de vecinos de San Telmo felices con el gobierno.
Por supuesto, a nadie se le ocurrió tampoco pensar en que cavar tanto en una calle tan antigua, de las originales de Buenos Aires, significa entrar en plena arqueología. No sólo no había un profesional a mano sino que los obreros no tenían la menor instrucción al respecto. Un buen día aparecieron huesos animales en plena calle y, para cuando los vecinos los vieron, los albañiles ya estaban por pasarles por encima con una aplanadora. Patricia Barral, de Defendamos San Telmo, corrió al lugar y avisó al ministerio, que detuvo el trabajo y mandó al arqueólogo Marcelo Weissel. Este se llevó los huesos, ya rotos, y una piedra de bola del pavimento colonial.
Este miércoles se volvió a perder la chance de mostrar un poco de cultura. Resulta que justo enfrente del viejo conventillo apareció una pequeña estructura de ladrillos, una mínima cámara abovedada que alguna vez fue parte de los desagües porteños. El artefacto fue rápidamente tapado con hormigón, no sea cosa que los importantes trabajos se demoraran otra vez.

Pavimentos
Mientras el ministerio de Crear Opositores sigue con estas tareas, los vecinos de San Telmo debaten sus veredas y se desesperan por sus luces. Resulta que el gobierno porteño quiere cambiarlas todas, más allá del desmán de la peatonalización de Defensa. Las opciones son gris o colorado, en esos baldosones que se usan ahora. La posición mayoritaria es de aceptación del baldosón, que al menos unificaría la colección de parches que se ve hoy. Y la discusión pasa por el color de las nuevas veredas, con bandos ya definidos que coinciden en que se deben mantener los pavimentos tradicionales en aquellos conjuntos donde la ley marca que no se cambien, como la placita Dorrego.
Donde no hay discusión es en la oposición al cambio de luces en el que sigue emperrado el otro ministerio de Inventar Vecinos Enojados, el de Espacio Público. Las lumbreras urbanísticas quieren llenar San Telmo de columnas de alumbrado, objetos que nunca existieron en el barrio. Cuando se les objeta el cambio, dicen tonterías increíbles como que las columnas son más seguras... Resulta que las columnas son aparatos enormes y pesados de metal, material que tiene la mala costumbre de oxidarse y romperse. Cada tanto, alguna columna se cae con resultados desagradables, en particular para el auto estacionado abajo.
Los vecinos defienden sus luces colgantes, las catenarias, que le dan carácter al barrio y también buena luz. Lo que todos comentan es la extraordinaria ignorancia y la conmovedora indiferencia de los funcionarios implicados en estas obras. Por ejemplo, una y otra vez les dicen a los vecinos que en Palermo Viejo se cambiaron las luces y eso fue una mejora. No entender la diferencia entre el casco histórico de la ciudad y cualquier otro lugar de Buenos Aires es tan básico que lo deja a uno pensando. Por ejemplo, en por qué tanto entusiasmo en hacer obras caras y resistidas. Habrá que ir siguiendo la evolución patrimonial de los responsables.
Por ejemplo, ¿qué gana la Ciudad con que una cuadra de la calle Estados Unidos tenga ahora la vereda más ancha, de modo que queda alineada con las demás? Esto es borrar un viejo accidente colonial, una irregularidad inexplicada en la grilla española. Para enderezar la calzada se levantaron los adoquines, se hizo una cama de hormigón, se construyó un nuevo cordón y se volvió a poner todo. Buen dinero en malas ideas.

Fachadas, fachadas
El 18 de diciembre de 2008, el Jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri firmó el decreto 1508. La única manera de saber que este objeto legal existe es sabiendo que un decreto no recibe un número hasta que es firmado. Este misterio es porque el decreto nunca se publicó en el Boletín Oficial, que muestra un atraso alarmante, con lo que no tiene la menor validez. Como recordará Macri de sus lejanas clases de Educación Cívica, existe eso de la publicidad de los actos de gobierno: las leyes y decretos valen a partir de su publicación oficial, no a partir de que las firme el Jefe.
Este legalismo por supuesto no detuvo al gobierno, que ya llamó a licitación para hacer una obra de lo más delicada. El decreto es de lo más extraño y comienza afirmando que los vecinos pidieron la restauración de sus fachadas sobre la calle Defensa, por lo que la Dirección General de Descentralización y Participación Ciudadana, que depende de la Subsecretaría de Atención Ciudadana de la Jefatura de Gabinete, hizo un relevamiento. En este estudio, Descentralización descubrió que la mayoría de estos edificios están catalogados, tienen valor patrimonial y están en el Casco Histórico porteño. El texto sigue con inanidades como recordar que se viene el Bicentenario y con una suerte de justificación de las obras –el gobierno tiene miedo de que lo acusen de algo por usar dinero público para reparar fachadas privadas–. Luego miente abiertamente al decir que “la recuperación y puesta en valor del barrio de San Telmo y su casco histórico, por ser el escenario en donde transcurrieron los hechos más importantes que finalmente permitieron la conformación del Primer Gobierno Patrio, constituye una de las prioridades de esta Administración”, lo cual es evidentemente falso.
Con más apego a la verdad, el decreto descubre edificios valiosos sobre Defensa, como el convento de Santo Domingo, y menciona la eternamente prometida y jamás realizada obra de los Altos de Elorriaga, el conjunto de casonas de la esquina de Alsina que pertenecen al Museo de la Ciudad. Luego aparecen generalidades sobre qué se va a hacer: “acciones de consolidación y de mantenimiento de las características originales de los bienes o espacios abiertos, con la posibilidad de restituir partes alteradas y/o faltantes, con elementos originales; el hidrolavado y preparación de superficies, revoques, pintura, revestimiento de basamentos, mampostería y carpintería”.
Como para que nadie se alegre, el decreto menciona explícitamente el bodrio de Prioridad Peatón y hasta lo saluda anunciando que “una vez lograda la semipeatonalización de la calle Defensa, se descubrirá un nuevo paisaje arquitectónico que hoy se encuentra oculto entre el deterioro de los edificios, la falta de mantenimiento, la contaminación de los materiales y el tránsito de autos”.
Los problemas empiezan a la hora de las imprecisiones. El decreto avisa que será necesario firmar “convenios” con los privados cuyas fachadas serán restauradas. Firmar un convenio de éstos puede ser un caballo de madera que reíte del de Troya. Por un lado parece atractivo: viene el gobierno porteño y arregla la fachada que uno no tiene con qué mantener. Pero atrás viene la obligación de mantenerla una vez restaurada. Como nadie tiene la menor idea de cómo se va a hacer este trabajo, con qué parámetros y materiales, y bajo la dirección técnica de qué especialista, y como uno ya sabe con qué bueyes se ara en Buenos Aires, el resultado puede ser un arreglo mal hecho que el vecino esté obligado a mantener. Caro, malo, porteño.
El que quiera asustarse preventivamente tendrá que esperar a que el procurador porteño, al que el decreto explícitamente afirma haber consultado, le diga a Macri que lo publique. Sólo entonces se sabrá quién cae en la bolada, ya que el 1508 cita dos anexos que nadie vio nunca, con la lista de edificios a intervenir y el modelo del convenio que deberán firmar los vecinos con la “señora Subsecretaria de Atención Ciudadana, dependiente de la Jefatura de Gabinete de Ministros”.

Mientras tanto...
Como para terminar de mufarlos, los vecinos de San Telmo tienen otra novedad del sector privado. Resulta que ya está anunciada la obra del Quartier Garay, una torre de 27 pisos en Avenida Garay al 700, de ésas con amenities, pileta y cancha de algo. Ya se demolió mucho en la cuadra para hacer lugar al monstruo. Los vecinos comentaron el tema con los funcionarios, que se dedicaron a mover la cabeza en pésame, decir ¡qué barbaridad! y jurar que nada pueden hacer.

Ver: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/m2/10-1570-2009-01-24.html

PATRIMONIO URBANO

La ley 2548 vuelve a vivir

Por Sergio Kiernan

La ley 2548 vuelve a las andadas esta semana. Prorrogada en diciembre por un año más, casi ampliada a dos y a toda la ciudad, la ley que protege una amplia zona de nuestra ciudad puede ser tratada este jueves en la Legislatura. El PRO la va a poner en el temario, sobre tablas, y la iniciativa está reuniendo voluntades en varios bloques.
La 2548 tomó el inolvidable engendro de Ibarra-Telerman que quería venderle un Paisaje Cultural porteño a la Unesco y lo transformó a fines de 2007 en algo efectivo y real. Resulta que el verso del Paisaje –que tantos viajes, honorarios y publicaciones rindió a sus padrinos y particularmente a sus madrinas– hasta tenía cierta existencia legal. Abarcando casi toda la ribera del Plata, de La Boca a Palermo, el área reúne buena parte del patrimonio edificado porteño.
En diciembre de 2007, el flamantísimo oficialismo se encontró con una naciente crisis por temas patrimoniales, un ítem nuevo en la agenda política porteña que ahí demostraba su enorme potencial. Con buenos reflejos, el PRO aceptó que el polígono del Paisaje tuviera todos sus edificios anteriores a 1940 protegidos, en principio, con un mecanismo novedoso. El sistema normal para catalogar o proteger un edificio patrimonial es un engorro notable, ya que fue diseñado para que se proteja poco o nada: todo el trabajo lo tiene que hacer el catalogador y la Legislatura tiene que votar todo dos veces.
La novedad fue que en el perímetro la cosa era al revés: el demoledor es quien tiene que hacer el trámite. Igual, es mucho más simple que el de catalogación, ya que el tema va al Consejo Asesor en Asuntos Patrimoniales que tiene un brevísimo lapso para decir sí o no. Si el predio no es catalogable, el trámite vuelve al Ejecutivo para que lo autorice. Si es a proteger, va a la Legislatura.
Resulta que el sistema funcionó un año sin que quebraran las constructoras en fila ni hubiera una explosión de desempleo en el gremio. De hecho, el sector acomodó la novedad sin que se notara siquiera en el marco de la crisis internacional, que sí tuvo efectos. Por eso, a fin de año se esperaba la extensión por un año más sin sobresaltos. Fue entonces que el PRO lanzó la bomba, pidiendo que se extendiera a toda la ciudad y por dos años. Hasta hubo un comunicado por escrito del ministro de Desarrollo Urbano Daniel Chaín, enemigo abierto del patrimonio, apoyando la idea. Por varias razones, esto no ocurrió y la asamblea votó finalmente la extensión por un año y confinada al Paisaje.
Este martes, el PRO va a presentar en la comisión de Labor Parlamentaria, encargada de preparar el temario, la propuesta del tratamiento sobre tablas de la idea de diciembre, prorrogando el sistema por dos años y a toda la ciudad. La expectativa es que se debata y se vote este jueves mismo. La movida ya tiene consenso en los otros bloques. Inés Urdapilleta, del Frente para la Victoria y presidente de la comisión de Cultura, ya adelantó a m2 su voto positivo, aunque sigue con la idea de que la protección no sea apenas para edificios anteriores a 1940 sino que se amplíe a la primera modernidad, hasta 1955 o 1960.
Más aún avanza Enrique Olivera, de la Coalición Cívica, que explicó sin vueltas que la ampliación tiene el mismo espíritu del proyecto de ley presentado hace tiempo por Teresa de Anchorena, su colega de bloque y presidente de la comisión de Patrimonio.
Estos apoyos son esenciales porque un tratamiento sobre tablas implica dos dificultades. Primero, que la asamblea vote tratar el asunto. Y segundo, que lo apruebe con dos tercios de los presentes. Un proyecto normal, en sesión ordinaria, necesita la mitad más uno del voto, pero el precio para uno tratado sobre tablas es mayor.
Patricio Di Stefano, del PRO, es de los que andan contando votos y adelanta que si las cosas no salieran bien este jueves buscará que el proyecto tenga privilegio. Esa figura hace que la Legislatura tenga que tratar el proyecto en un término de tres semanas.
Con lo que queda en claro que el patrimonio es un asunto de la agenda política que están entendiendo los legisladores. Esta ley, ampliada y con dos años de plazo, puede ser la plataforma sobre la que se construya un sistema de leyes e instituciones para preservar el patrimonio, aclarar qué se puede hacer y qué no, y dar seguridad jurídica a la ciudad.

Ver: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/m2/subnotas/1589-147-2009-03-03.html

MACRI DESTRUYE LA CIUDAD


Las rampas de Defensa
La obra continúa, mientras el ministro afirma que sabe mejor que nadie qué necesita la ciudad.

Por Sergio Kiernan


El ministro de Inventar Opositores a Macri, Daniel Chaín, sigue con su obra en la calle Defensa. Como se recordará, Desarrollo Urbano tuvo la peregrina idea de peatonalizar toda la calle, de Plaza de Mayo a Parque Lezama, de modo de crear un “living urbano”. Resultó que esta genialidad es ilegal, porque el Ejecutivo no puede peatonalizar nada, poder reservado a la Legislatura. Como la bronca de los vecinos ya era palpable, los legisladores explicaron tersamente que ni se les ocurriera mandar la idea, ya que resultaría difícil pasar un proyecto tan piantavotos.
Por eso se empezó a hablar de “semipeatonalización”, palabreja inexistente hasta ahora y fea, pero legal al fin. El proyecto fue cambiando y cambiando, en parte a fuerza de perder amparos. Chaín, por orden judicial, tuvo que sentarse a negociar qué se iba a hacer con Basta de Demoler y, en parte, con los airados vecinos de San Telmo. Fue así que se abandonó la idea de cambiar todo el pavimento y nivelar acera y veredas: se mantendrán los cordones, las veredas y los adoquines.
El problema con hacer un acuerdo así es que genera un nivel grande de desorden, sobre todo cuando se habla con alguien que acuerda con pocas ganas. Por ejemplo, no se sabe bien qué pasará con los pasajes que tocan Defensa y hay un verdadero baile respecto a “iniciativas” como ensanchar las veredas. La cuadra en obras, Defensa entre Independencia y Chile, casi casi termina con una vereda más ancha que la otra. Al fin se decidió que no valía la pena demorar tanto y gastar tanto por veinte centímetros.
Esta incertidumbre emana del hecho de que el ministro Chaín no mostró el proyecto final, como le había ordenado hace meses el juez del amparo. Sólo ayer se iba a hacer una reunión de urgencia para mostrarlo a los vecinos, con cuatro meses de demora.
Pero el arquitecto Chaín comulga en el altar de los que opinan que los gobernados no saben nada y tienen que dejarles a los que sí saben decidir por ellos. Fue entonces que el sábado pasado aparecieron en la obra las plataformas elevadas de hormigón que se ven en la foto. Son dos bandas, una a cada lado de la desembocadura del pasaje, que casi llegan al nivel de la vereda. Cuando esté terminada la remodelación, la cuadra quedará empedrada a nivel normal y con dos grandes lomos de burro elevados, casi rasantes con los cordones y asfaltados. Son los lugares para que crucen los peatones.
Esto es una novedad inconsulta en una obra que tuvo como característica ser impuesta de mal modo. En la cuadra que se está remodelando los comerciantes están ahorcados por el bajón de público y un bar ya quebró. Nadie les avisó y no pudieron tomar la menor precaución para sobrevivir.

Esto ocurre en parte por la personalidad del ministro, que tiene opiniones fuertes y un modo de lo más altanero de expresarlas. Chaín era el que caminaba incesantemente en la audiencia del 31 de octubre en la calle Defensa, cuando escuchaba a los vecinos rechazar de forma unánime y vocal su proyecto. Todos sus gestos, su expresión y la manera de moverse trasuntaban un fastidio enorme. Parado en el patio del Centro Vecinal donde se hizo la audiencia pública, hablaba con un asesor y no hacía falta escucharlo para ver el desprecio con que recibía las críticas.
Chaín suele decir que todas las leyes de protección patrimonial de la ciudad están mal porque sólo vale la pena proteger “veinte edificios”. Para el arquitecto, en Europa “están locos” y los españoles “no saben nada”, lo que se notaría en que “Madrid es una cáscara”. Y los que lo critican son políticos: Chaín suele calmar a los suyos explicando que no hay ni un vecino que se oponga a sus obras y los que hablan en las audiencias son “peronistas” y “políticos”.
Este tipo de altanería violenta tiene muchos antecedentes en la arquitectura, disciplina con fantasías de rehacer el mundo. Le Corbusier propuso demoler Buenos Aires, medio que en serio, y hay que ver a Leon Krier despotricar contra las torres, bajo la mirada cariñosa de César Pelli. Que lo diga Chaín, sin embargo, es distinto por dos razones. Primero, porque es un ministro de un gobierno democrático y no un utopista. Y segundo porque ciertamente Chaín no es un Le Corbusier, un Krier o un Pelli. Su apagado perfil profesional, su nula carrera como pensador urbanístico, no lo cualifican para la estatua ecuestre. Y mucho menos para imponer obras explícitamente rechazadas por los vecinos.
Como para comparar: ¿Alguien escuchó alguna queja por el boulevard de la calle Caseros? Es una obra en pleno casco histórico cuerda y bonita. Hasta los faroles retro que instalaron son un gesto de entendimiento del entorno, ni hablar del agregado de un poquito de verde.